El profesor Fernando Padilla Vázquez, quien durante la visita del gobernador de Michoacán, Silvano Aureoles, a Aguililla, fue empujado por el mandatario estatal; consiguió un amparo de un juez federal a quien reclamaban protección para él y su hijo menor.
El juez consideró que tanto el gobernador como el secretario de Seguridad Pública violaron el derecho a la libre expresión y manifestación.
Fernando Padilla Vázquez fue empujado el pasado 13 de abril por el gobernador de Michoacán, Silvano Aureoles Conejo, mientras protestaba en la plaza central de Aguililla.
El juez resolvió que tanto el gobernador como el secretario de Seguridad Pública, Israel Patrón Reyes, ejercieron presión directa para evitar que Padilla y su familia protestaran contra la inseguridad en el municipio, donde el Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG) mantiene una disputa por el control de la localidad con Cárteles Unidos.
El juez sexto de distrito, Sergio Santamaría Chamú, concedió el amparo de la justicia a Padilla y su hijo menor, que reclamaron la protección tras el empujón del gobernador, quien le gritó “ya cállate, cabrón”.
Santamaría consideró acreditado que el titular de Seguridad Pública arrebató a Padilla una de las cartulinas “y mediante la intimidación por portar un arma de fuego larga repelió a los manifestantes”.
Padilla aseguró que desde el incidente ha recibido amenazas, al igual que sus familiares, mediante llamadas telefónicas donde le advierten que si no “se calma” lo van a desaparecer o asesinar.
El juez señaló que tanto Aureoles como Patrón violaron el derecho a la libre expresión y manifestación de Padilla y familia.
La resolución implica que el mandatario y el titular de Seguridad Pública deberán abstenerse de realizar actos similares en perjuicio del maestro.