El gobierno de Holanda aseguró que hará cumplir sus leyes que prohíben la cría y reproducción de razas de perros braquicéfalas, como los pugs. Sus rasgos exagerados y hocico muy pequeño significa una vida de mucho sufrimiento para estos pequeños, aseguró el país europeo.
Las razas braquicéfalas son aquellas que tienen cráneos anchos que no van acorde con su fisonomía, y que a largo plazo les ocasiona diversas enfermedades respiratorias y cardíacas.
Debido a lo anterior, Holanda decidió detener de manera inmediata la cría de pugs dentro de un “club de razas” que lucraba con reproducir cachorros de esta especie.
Por el momento, el estado holandés hace advertencias y cierra los centros de “apareamiento” animal, pero en breve estas actividades serán penadas con multas y prisión. Una ley vigente desde el 2014 regula esto, pero las autoridades y los centros protectores de animales debieron poner énfasis para lograr que se empiece a cumplir.
El gobierno europeo ha creado un sistema de “semáforo” para mantener un estándar evaluativo, en que clasifican a los animales según sus rasgos en tres colores: rojo, amarillo y verde. El rojo, por supuesto, es un animal cuya reproducción continua es inaceptable pues necesita demasiada atención y cuidados para tener una calidad de vida mínima.
Con luz roja hay más de 20 razas, incluidas el bulldog francés, el inglés y el pug. En el amarillo se encuentran canes cuyo hocico es un tercio de la mitad de su cráneo y que deben “ser evaluados” para ver si cumplen otros criterios.
Hay muchos perros viviendo en la calle o esperando ser adoptados, sin comida, amor ni hogar. Deberíamos hacernos cargo de ellos en lugar de pagar mucho dinero para aportar al mercado de razas que sólo sigue reproduciendo ejemplares que sufren por no poder respirar bien. Y que además, para ello, usan perritas que mueren sufriendo al ser usadas como máquinas reproductivas.