
La Cámara de Diputados aprobó con 340 votos a favor, siete en contra y 54 abstenciones la Ley Federal para Prevenir y Sancionar los Delitos Cometidos en materia de Hidrocarburos, dicha ley impone penas de 15 a 25 años al robo de gasolina y al saqueo de oleoductos. El castigo es muy superior al de una violación (8 a 14 años en la legislación federal) y queda a poca distancia del asesinato (30 años, el mínimo).
En el dictamen aprobado este jueves por los diputados, se especifica que el objetivo es evitar que Pemex pierda más de 40 mil millones de pesos anuales, consecuencia de este ilícito. También sanciona con penas de tres a seis años de cárcel a quienes alteren los sistemas de medición en la venta de gasolina o diésel.
No obstante, algunos legisladores eliminaron un artículo que contemplaba encarcelar a quien obstruyera o impidiera el acceso o funcionamiento a ductos, equipos, instalaciones o inmuebles de la industria petrolera, porque consideraron que era una forma de criminalizar la protesta.